Aku no Hana - Análisis

Está temporada ninguna otra serie me a dejado más impactado que “Las flores del mal.” Es un anime que presenta un tipo de horror distinto que planta el miedo en una manera cruel y la vez sutil; el horror en lo mundano. La noción de ser prisioneros de la rutina y el como se da la presión del ser estoico y conformista contra la de tomar decisiones y a su vez cometer errores.

La historia gira entorno a Takao Kasuga un estudiante de secundaria que es apasionado a la literatura, admira a Saeki, una chica a la que nunca pensaría hablarle y es el orgullo de sus padres. Su vida cambia cuando por un impulso roba la ropa de gimnasia de Saeki y Nakamura, la chica problemática de su salón lo descubre en el acto. El pesar de Kasuga va creciendo conforme esta decisión cambia su vida, sale de lo que para él es ordinario, común… normal.

Las flores del mal ahondan en el conformismo; lo que debe y tiene que ser, lo que es normal, lo que esta aceptado y lo que va en contra.  El temor al cambio; quien soy a consecuencia de mis acciones, a donde me están llevando estás acciones. El conflicto de existencia: ¿A dónde voy? ¿Quién soy? ¿Qué soy para los demás? ¿Me acepto?

La ejecución de esta serie reta a su audiencia ya que no muestra aspectos típicos o tradicionales que se esperan de este medio. Hay largas pausas donde los personajes con mínimo lenguaje corporal muestran sus emociones, hay momentos donde el cuadro se congela en lo que los personajes meditan alguna situación y en muchas ocasiones no se nos dice que están pensando. Los personajes son desagradables y conflictivos, más que nada muestran defectos y personalidades que no se admiran.

Hay molestias en tanto a la decisión de usar rotoscopia principalmente por no ser visualmente atractiva el nivel de ejecución. Sin embargo este estilo de animación funciona en como proyecta el lenguaje corporal y la sutileza de los movimiento de los personajes. Pienso que las escenas donde no hay movimiento funcionan por este estilo, detalles como el río, lluvia y tomas con muchos personajes se ven muy orgánicos. Aun así el diseño de personajes no se beneficia mucho y la animación suele congelarse frecuentemente aunque esto para dar un efecto dramático.

A diferencia del manga el contexto de la historia es más prevalente, mostrando un pueblo frío y rígido carente de vida y aislado entre montañas.

En corto está serie no será, para nada un éxito, pero sin duda fue la que más polaridad y discusión tuvo. La reflexiones generadas de las que me pude percatar me dicen mucho de cómo el medio puede ofrecer más que solo refinar convenciones y estilos. A sido una impredecible sorpresa esta serie que raya entre la intención de su visión contra las carencias de sus niveles de producción.